Más de un millón de personas se vieron obligadas a desplazarse en el interior de Sudán desde que estalló el conflicto armado entre el ejército nacional y un grupo paramilitar, el 15 de abril pasado, informó la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Además, 319.000 personas huyeron a países vecinos, sobre todo a Egipto, adonde llegaron 132.000; y a Chad, donde se registraron 80.000 llegadas, sostuvo la agencia de la ONU en un comunicado recogido por la agencia de noticias AFP.
Se estima que cerca de 1.000 personas murieron, la mayoría en la capital, sus inmediaciones y en el estado de Darfur del Oeste
Los combates parecían menos intensos en la capital de Sudán, Jartum, en el segundo día de una tregua de una semana para permitir el paso de civiles y de ayuda humanitaria.
Desde el 15 de abril, la guerra entre el Ejército, dirigido por el general Abdel Fatah al-Burhan, y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), lideradas por el general Mohamed Hamdan Daglo, dejó un millar de muertos en este país, uno de los más empobrecidos del mundo.
Los combates entre los bandos surgieron por desacuerdos en relación con el futuro de los paramilitares y su integración dentro de las Fuerzas Armadas.
Los combates entre los bandos surgieron por desacuerdos en relación con el futuro de los paramilitares y su integración dentro de las Fuerzas Armadas
A partir de entonces, se libraron varios enfrentamientos en la capital, Jartum, con bombardeos, disparos y explosiones, y millones de sudaneses debieron atrincherarse en sus hogares en medio de un calor sofocante, sin agua corriente ni electricidad.
La población de Sudán sufre escasez de alimentos, dinero, medicamentos y combustible.
Se estima que cerca de 1.000 personas murieron, la mayoría en la capital, sus inmediaciones y en el estado de Darfur del Oeste, según fuentes médicas.
Más historias
Bombardeo en Gaza
Ya son 2000 los muertos en el Líbano por ataques israelíes
Abbas pidió que se deje de enviar armas a Israel